Visitas:0 Autor:Editor del sitio Hora de publicación: 2024-06-25 Origen:Sitio
Los aditivos de fluidos de metal funcionan un papel crucial en la mejora del rendimiento de los fluidos de corte. Estos aditivos son esenciales para mejorar la eficiencia, la longevidad y la seguridad de las operaciones de metalurgia. Al incorporar varios aditivos de fluido de metalurgia, los fabricantes pueden lograr una mejor lubricación, enfriamiento y protección contra el óxido y la corrosión. En este artículo, profundizaremos en los diferentes tipos de aditivos de fluidos de metalurgia y sus funciones específicas para mejorar el rendimiento del fluido de corte.
aditivos lubricantes juegan un papel fundamental en la formulación de fluidos de metalurgia, mejorando significativamente su rendimiento. Estos aditivos están diseñados para minimizar la fricción entre la herramienta de corte y la pieza de trabajo, reduciendo efectivamente el desgaste. Al mejorar la lubricación, facilitan los cortes más suaves, extienden la vida útil de las herramientas de corte y aumentan la eficiencia del mecanizado. Los aditivos lubricantes tradicionales, como las grasas sulfuradas, las parafinas cloradas y los ésteres de fosfato, son conocidos por su capacidad para formar una película protectora en la superficie de la herramienta, disminuyendo así el contacto de metal a metal.
La incorporación de avances en química sostenible, productos como los lubricantes de Ruqinba para fluidos de corte sintéticos y semisintéticos representan una evolución significativa en este dominio. Estos lubricantes están diseñados para ofrecer lubricación superior, lo que se traduce en un desgaste reducido, una mayor precisión de mecanizado, vida de herramientas prolongada y mayor productividad. Por ejemplo, el 1612C, un aceite vegetal modificado con éster autoemulsionante, está adaptado para fluidos metalúrgicos completamente sintéticos, que muestra características de espuma bajas, alta lubricidad y propiedades no corrosivas hacia metales no ferrosos, incluidas las aleaciones de aluminio-magnesio. Del mismo modo, el lubricante de éster poliéter 1516 sobresale en fluidos de corte a base de agua, que proporciona una limpieza, humectación y lubricación excepcionales, junto con el control de espuma y la adaptabilidad del agua dura.
Los inhibidores de la óxido son otra categoría crítica de aditivos de fluidos de metalurgia. Estos aditivos evitan la formación de óxido tanto en la pieza de trabajo como en las herramientas de corte. Los inhibidores de la óxido funcionan creando una barrera protectora que evita que la humedad y el oxígeno lleguen a las superficies metálicas. Esto es particularmente importante en las soluciones de metalurgia donde se utilizan fluidos a base de agua, ya que el agua puede acelerar la formación de óxido. Al incorporar inhibidores de la óxido, los fabricantes pueden garantizar la longevidad e integridad de sus componentes metálicos.
Entre las ofertas innovadoras de RUQINBA se encuentra el 313: 2,4,6-tri- (ácido 6-aminocaproico) -1,3,5-triazina C21H36N6O6, un inhibidor de óxido sin cenizas a base de agua conocido como ácido ternary 3066. Esta solución de metal ambientalmente amigable está diseñada para diversos sistemas de fluido de metalworkworking, siempre equipo.
Los inhibidores de la corrosión son similares a los inhibidores de la óxido, pero están específicamente diseñados para proteger contra diversas formas de corrosión, incluida la corrosión de picaduras, galvánica y de grietas. Estos aditivos de fluidos de metalurgia son esenciales en entornos donde diferentes metales están en contacto entre sí, ya que evitan reacciones electroquímicas que pueden conducir a la corrosión. Los inhibidores de la corrosión funcionan al neutralizar los ácidos y otros agentes corrosivos, salvaguardando así las superficies metálicas y asegurando la durabilidad de las piezas y herramientas de trabajo.
Un avance ejemplar en este campo es la introducción del inhibidor de corrosión de aluminio de cetona sin siloxano sin fosfato sin fosfato. Este producto innovador representa un salto significativo en la tecnología de protección contra la corrosión, específicamente adaptada para la protección de los materiales de aluminio en entornos acuosos. La capacidad del 1020c para disolverse completamente en el agua sin dejar residuos lo convierte en una solución ideal para combatir la corrosión en aluminio, un material conocido por su susceptibilidad a la corrosión cuando se expone a ciertas condiciones. Esta formulación especializada no solo garantiza la durabilidad de los componentes de aluminio, sino que también contribuye a la sostenibilidad de los procesos de metalurgia al eliminar la necesidad de fosfatos, lo que puede tener implicaciones ambientales. A través de tales soluciones avanzadas, la industria de metalurgia puede lograr una protección de corrosión superior, asegurando la longevidad y la confiabilidad de los componentes metálicos en diversas aplicaciones.
En conclusión, los aditivos de fluidos de metalurgia son indispensables para mejorar el rendimiento de los fluidos de corte. Desde aditivos lubricantes que reducen la fricción hasta los inhibidores de la corrosión y la corrosión que protegen las superficies metálicas, estos aditivos juegan un papel crucial para garantizar operaciones de metalurgia eficientes y efectivas. Al comprender los diferentes tipos de aditivos de fluido de metalurgia y sus beneficios, los fabricantes pueden tomar decisiones informadas para optimizar sus procesos de mecanizado y lograr resultados superiores.